¿Qué es la protección pasiva contra incendios?
La protección pasiva contra incendios, es el sistema preventivo para detectar y/o minimizar los daños, personales y materiales, en caso de incendios. De esta manera, aseguramos el contenido y el continente, de cualquier edificio, y, sobre todo, la seguridad de las personas.
Normativa protección pasiva contra incendios
La normativa vigente para la protección pasiva contra incendios son, garantizar la estabilidad del edificio, limitar el desarrollo y daños de un incendio, y, también, garantizar el control del fuego, a la vez que se facilita la evacuación de las personas.
Los productos que se usan en los sistemas de protección pasiva contra incendios siguen controles de calidad muy estrictos, dichos productos deben superar una serie de ensayos para demostrar su eficacia.
Los sistemas de protección pasiva contra incendios, deben tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Ignifugación de los materiales.
- Compartimentación del edificio.
- Protección de la estructura del edificio.
- Señalización.
Comprende elementos como puertas, pintura y techos reforzados con materiales endotérmicos, que sirven para limitar la propagación del fuego, del humo y del calor.
Los objetivos de la protección pasiva contra incendios
- Los objetivos principales de la protección pasiva, son los siguientes:
- Detener la progresión de los humos.
- Evitar la propagación de las llamas.
- Contener los efectos térmicos en área.
- Mantener la estabilidad del fuego de los elementos estructurales.
Seguir la normativa vigente acerca de los sistemas de protección pasiva contra incendios, es fundamental para evitar males mayores, si ya es poco, sufrir un incendio. Es básico llevar a cabo todo lo que en ella aparece, porque son normas y elementos necesarios, para que en caso de incendio no se propague más el fuego, no dañe en exceso los materiales, no afecte la estructura del edificio, y sobre todo, llevar a cabo una evacuación ordenada y rápida de las personas que se encuentren en el edificio.
Algunos de los elementos que sirven para este fin son los sistemas de detección de incendios, ya que detectar el incendio a tiempo reduce considerablemente la gravedad del mismo y los daños que provoca.
Hasta que llegan los bomberos, ese tiempo es crucial y si hemos llevado a cabo las medidas del sistema de protección pasiva contra incendios, los daños serán menores y será más fácil que las personas que se encuentren en el edificio, sean capaces de salir de éste, por ellas mismas, lógicamente, si se encuentran en buen estado.
La señalización es vital
Las señales de evacuación es un aspecto muy importante en los edificios, cuando se produce un incendio, nos invade el miedo y los nervios, actuando de manera totalmente distinta a cómo lo haríamos en una situación normal, nos cuesta más tomar decisiones y llevarlas a cabo, por eso, la señalización, nos ayudará a orientarnos y a saber dónde se encuentran las salidas de emergencia y los extintores.
No esta de más, tener en cualquier edificio, unas normas a la vista de cómo actuar en caso de incendio y que sean conocidas por todos. La más importante, es salvar la vida y no los daños materiales, y en caso de querer apagar el fuego con extintores contra incendios, asegurarnos que nos encontramos bien físicamente, que la estructura del edificio se mantiene correctamente y que no corremos peligro, dentro de las circunstancias.
Recuerda, que llevar a cabo esta normativa de protección de incendios, hará que la estructura del edificio se mantenga estable y se coloquen las señalizaciones correspondientes, para saber en todo momento, cómo actuar en caso de incendio.
